Suelen cruzarse muchas ideas oportunas en momentos inoportunos. Ideas que ni siquiera llego a registrar en una hoja. Mi memoria no es la de antes y por el momento he decretado que la culpa es de las hormonas.
Aquí me encuentro repentina e inesperadamente con la posibilidad de tener cinco minutos para dedicarle a este capricho virtual que comencé hace unos años y me encuentro con que esas ideas oportunas no me encuentran a mi aquí y ahora.
Será cuestión de colgarme un anotador al cuello, andar con una bic detrás de la oreja como el carnicero de la equina y entrenarme para registrar las ideas en unos pocos segundos o… comenzar a tomar Memorex periódicamente.
5 comentarios:
Dale...que estaremos esperando. Saludos. Lo conociste a Egaña?
Si, Mariano fue profesor mío, y trabajé con su mujer en el Concejo Municipal. Fue un gran profesor y guardo el mejor de los recuerdos. Realmente fue un shock la noticia.
Y... uno tiene sus días, o semanas, en fin.
Acá tuvo mucha repercusión lo de Egaña, se ve que era muy querido. A mí me puso triste sin conocerlo, por lo que dijeron, por quiénes lo dijeron y porque era "del palo". Mientras tanto... Bariloche se hunde lentamente en lo que me contaron que fue hace un tiempo. Y llueve, llueve, llueve... como pocas veces... (parece que hoy estreno mi capa de agua, que compré después de mi primer otoño muy mojado).
Me pasa también, amenudo. Y cuando tengo el tiempo y el papel o la laptop en frente, se esconden las palabras, las historias, los colores...
qué joda, realmente!
Saludos.
Todo tiene un inicio. Y como me escribió Fabi, un blog es como un latir del corazón, a veces lento, a veces rápido, pero siemrpe reflejo de vida: TU VIDA.
Gracias por escribir y esperar. A veces mi corazón va demasiado lento.
Un beso
Publicar un comentario